29 de julio - Expectativas - Sólo Por Hoy

«A medida que comprendemos nuestra necesidad de ser perdonados,  aprendemos a perdonar.»

Texto Básico, p. 46

Nuestro comportamiento con las personas que nos rodean es un espejo de cómo nos portamos con nosotros. Cuando nos exigimos perfección, también exigimos perfección a quienes nos rodean. En recuperación, al esforzarnos por corregir y sanar nuestra vida, quizás esperemos que los demás también trabajen tan duramente y se recuperen al mismo ritmo. Y así como muchas veces no nos perdonamos nuestros propios errores, tal vez excluyamos a nuestros amigos o familiares porque no satisfacen nuestras expectativas.

Practicar los pasos nos ayuda a comprender nuestras limitaciones y nuestra condición humana. Logramos ver nuestros fallos como errores humanos. Nos damos cuenta de que nunca seremos perfectos, que a veces defraudamos a otros y a nosotros mismos; deseamos que nos perdonen.

Poco a poco aprendemos a aceptarnos y empezamos a ver a los demás con el mismo corazón tolerante que sabe aceptar. Estas personas también son humanas, tratan de hacerlo lo mejor posible y a veces no lo consiguen.

Sólo por hoy: Trataré a los demás con la tolerancia e indulgencia que deseo para mí.

Entradas populares de este blog

6 de enero - ¿Cómo funciona? - Sólo Por Hoy

7 de marzo - Prioridades - Sólo Por Hoy

26 de diciembre - Un Poder que nunca falla - Sólo Por Hoy