19 de febrero - Reservas - Sólo Por Hoy
«La recaída nunca es un accidente, indica que aún tenemos reservas con nuestro programa.»
Una reserva es algo que apartamos para usar en el futuro. En nuestro caso, una reserva es esperar que si pasa tal o cual cosa, seguramente recaeremos. ¿Qué acontecimiento prevemos como demasiado doloroso de soportar? ¿Quizás pensemos que si nos deja el cónyuge o la pareja, tendremos que drogarnos. O que si nos quedamos sin trabajo, seguramente consumiremos. O tal vez la posibilidad de que se muera un ser querido nos parezca insoportable. En todo caso, las reservas que albergamos nos autorizarán a consumir cuando estas cosas se hagan realidad; lo que sucede a menudo.
En vez de prepararnos para la recaída, si examinamos nuestras expectativas y las modificamos allí donde sea posible, podemos prepararnos para el éxito. La mayoría llevamos dentro un catálogo de desgracias anticipadas, estrechamente relacionadas con nuestros miedos. Si observamos cómo otros miembros superan penas semejantes, podemos aprender a sobrevivir al dolor. Podemos aplicar estas lecciones a nuestras expectativas. En lugar de decir, si pasa tal cosa tendré que drogarme, podemos tranquilizarnos diciéndonos que nosotros también somos capaces de superar limpios lo que nos traiga hoy la vida.
Sólo por hoy: Examinaré las reservas que puedan poner en peligro mi recuperación y las compartiré con otro adicto.
Texto Básico, p. 91
Una reserva es algo que apartamos para usar en el futuro. En nuestro caso, una reserva es esperar que si pasa tal o cual cosa, seguramente recaeremos. ¿Qué acontecimiento prevemos como demasiado doloroso de soportar? ¿Quizás pensemos que si nos deja el cónyuge o la pareja, tendremos que drogarnos. O que si nos quedamos sin trabajo, seguramente consumiremos. O tal vez la posibilidad de que se muera un ser querido nos parezca insoportable. En todo caso, las reservas que albergamos nos autorizarán a consumir cuando estas cosas se hagan realidad; lo que sucede a menudo.
En vez de prepararnos para la recaída, si examinamos nuestras expectativas y las modificamos allí donde sea posible, podemos prepararnos para el éxito. La mayoría llevamos dentro un catálogo de desgracias anticipadas, estrechamente relacionadas con nuestros miedos. Si observamos cómo otros miembros superan penas semejantes, podemos aprender a sobrevivir al dolor. Podemos aplicar estas lecciones a nuestras expectativas. En lugar de decir, si pasa tal cosa tendré que drogarme, podemos tranquilizarnos diciéndonos que nosotros también somos capaces de superar limpios lo que nos traiga hoy la vida.
Sólo por hoy: Examinaré las reservas que puedan poner en peligro mi recuperación y las compartiré con otro adicto.